Sosopost vacacional

El viernes mi compañera de mesa y yo nos pusimos como salmonetes en el rato del café, ya veis que la vida del becario es muy dura. Anda que ya nos vale a las andaluzas venir a tostarnos al norte. Afortunadamente no me quemo nunca, y el colorado se fue rápido dejándome un bonito disfraz de albañil, así que esta mañana, pese al frío (24ºC al sol :p) me fui a la playa a ver si me homogeneizaba un poco.

La playa de Santander es un zoo en miniatura, cuando la marea baja se forman pozas entre las rocas y cientos de cangrejos y otros animalillos quedan atrapados. Uno puede pasear por el fondo arenoso, contemplando el ajetreo. Parecen las rebajas de los ermitaños, atrapado en masa aprovechan para cambiar de casa, y se pelean, igualito igualito, que las marujas de nuestra especie. Uno puede pasear entre las rocas porque el fondo es arenoso, los niños y los jubilados se afanan en recolectar todo lo que se mueva o se pueda comer, y peces bien grandes te pasan nadando entre los pies. Es fantástico, y a una, Marbellí de nacimiento, criada en un mar cuya fauna se compone de bolsas de plástico y otras lindezas, le extraña que el turismo no haya acabado ya con todo eso.

En medio de tanto ajetreo, yo he salido a mi caza particular, caza de información:
Llevo aquí ya casi dos semanas con una frustración muy grande. Por las costas cántabras, ademas de gaviotas vuelan otras aves marinas, mucho más pequeñas, con un vuelo muy simpático, una especie de kipa negro en la cabeza, una mala leche que alucinas y que nadie sabe decirme cómo se llaman.
Unos viejos del lugar han atinado a decirme que estas aves llegaron hará un par de años de no se sabe dónde y que atacan a los patos y las gaviotas y, segun he podido observar, también a la calva de un señor que andaba buscando moluscos demasiado cerca de la roca donde descansaban un par de polluelos ya creciditos.

Pero bueno, por una ventana en la que he descubierto la señal de un vecino amable, y preguntándole al ojo que todo lo ve, he encontrado lo que buscaba:

Foto de : http://www.martinparrsnaturepics.com

Foto de TerritorioNatural

Se trata del Sterna albifrons, comunmente conocido como Charracito y segun leo por ahí pasa por Cantabria en su ruta migratoria veraniega hacia Europa, donde anida, desde África, donde pasa el invierno. Pero se ve que en los últimos tiempos algunos han decidido acortar su viaje y anidar en la Península.

Y con un misterio resuelto os dejo, que me voy a un concierto de Gwendal y Celtas Cortos a un pueblo de por aquí , que es gratis :)